El técnico portugués preparó un entrenamiento duro para una plantilla que está respondiendo a la perfección. Kaká, hizo trabajo específico en el gimnasio.
El técnico portugués ya cuenta con 21 jugadores. Dieciséis del primer equipo -Cristiano Ronaldo, Pepe, Diarra, Lass, Pedro León, Granero, Dudek, Adán, Benzema,Gago, Marcelo, Garay, Drenthe, Higuaín, Di María y Kaká-, más cinco canteranos, –Morata, Tébar, Juanfran, Alex y Nacho-. Mourinho apretó las clavijas a sus jugadores con una dura sesión de entrenamiento. Todos se ejercitaron sobre el césped a excepción de Kaká, que trabajó en el gimnasio.
Se acerca la fecha para el debut de Mourinho en el banquillo del Real Madrid - el miércoles 4 de agosto el Real Madrid se enfrenta en San Francisco al América- y el técnico portugués quiere tenerlo todo bien atado.
En la sesión de entrenamiento, el técnico madridista reunió a los suyos antes de comenzar y estuvo charlando como unos quince minutos con su plantilla. Posteriormente, los jugadores iniciaron los habituales ejercicios de estiramiento y de calentamiento.
Una vez más, el equipo trabajo la presión asfixiante sobre la pelota y la salida del balón a dos toques. Este aspecto es clave para Mourinho y lo machaca entrenamiento tras entrenamiento. Todo bajo la máxima exigencia de un entrenador que no da un respiro a los suyos. Es un espectáculo observar cómo el portugués motiva a los suyos con gritos y palabras de ánimo.
Tras trabajar la presión y la rapidez el equipo ensayó los lanzamientos a portería. Dos grupos de jugadores disparando a puerta y sometiendo a un aluvión de lanzamientos a Dudek y Adán. Un solo control y disparo. Eso es que les pedía el técnico a los jugadores. Tras finalizar este ejercicio, los jugadores estiraron unos minutos para retomar fuerzas y refrescarse. Cinco minutos que vinieron de maravilla a una plantilla que ya acumula una importante carga de trabajo en sus piernas.
Ya como ejercicio final, los jugadores se dividieron en dos grupos y vuelta a trabajar el concepto de presión y robo de balón. Una y otra vez. Y los jugadores lo ejecutan con una disciplina casi espartana. Como plato fuerte final Mourinho montó un partidillo donde se pudo ver en práctica las ideas del técnico portugués. Rápidas transiciones en defensa y ataque, presión, robo, y velocidad para abrir el balón a las bandas y ensanchar el campo.
El entrenamiento finalizó con los jugadores estirando y recuperándose del esfuerzo, ya que el calor apretó hoy en Los Ángeles y la plantilla lo acusó. Para el martes, cambia la rutina, por la mañana, entrenamiento a puerta cerrada a partir de las 10:00 horas (19:00 h. en España) y por la tarde, a partir de las 17:00 horas, sesión abierta para la prensa desde las 17:00 horas (02:00 h. en España) hasta las 17:15 horas. El partido del debut se acerca y Mourinho busca la máxima concentración de sus jugadores.
En la sesión de entrenamiento, el técnico madridista reunió a los suyos antes de comenzar y estuvo charlando como unos quince minutos con su plantilla. Posteriormente, los jugadores iniciaron los habituales ejercicios de estiramiento y de calentamiento.
Una vez más, el equipo trabajo la presión asfixiante sobre la pelota y la salida del balón a dos toques. Este aspecto es clave para Mourinho y lo machaca entrenamiento tras entrenamiento. Todo bajo la máxima exigencia de un entrenador que no da un respiro a los suyos. Es un espectáculo observar cómo el portugués motiva a los suyos con gritos y palabras de ánimo.
Tras trabajar la presión y la rapidez el equipo ensayó los lanzamientos a portería. Dos grupos de jugadores disparando a puerta y sometiendo a un aluvión de lanzamientos a Dudek y Adán. Un solo control y disparo. Eso es que les pedía el técnico a los jugadores. Tras finalizar este ejercicio, los jugadores estiraron unos minutos para retomar fuerzas y refrescarse. Cinco minutos que vinieron de maravilla a una plantilla que ya acumula una importante carga de trabajo en sus piernas.
Ya como ejercicio final, los jugadores se dividieron en dos grupos y vuelta a trabajar el concepto de presión y robo de balón. Una y otra vez. Y los jugadores lo ejecutan con una disciplina casi espartana. Como plato fuerte final Mourinho montó un partidillo donde se pudo ver en práctica las ideas del técnico portugués. Rápidas transiciones en defensa y ataque, presión, robo, y velocidad para abrir el balón a las bandas y ensanchar el campo.
El entrenamiento finalizó con los jugadores estirando y recuperándose del esfuerzo, ya que el calor apretó hoy en Los Ángeles y la plantilla lo acusó. Para el martes, cambia la rutina, por la mañana, entrenamiento a puerta cerrada a partir de las 10:00 horas (19:00 h. en España) y por la tarde, a partir de las 17:00 horas, sesión abierta para la prensa desde las 17:00 horas (02:00 h. en España) hasta las 17:15 horas. El partido del debut se acerca y Mourinho busca la máxima concentración de sus jugadores.
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